martes, 3 de mayo de 2011

Dan Mathews "Do it all"


Dan Mathews y sus Youghurt Daze se separaron hace ya siete años, tiempo en el que Dan, lejos de quedarse quieto, ha seguido dándole vueltas a su cabeza y persiguiendo esas inquietudes musicales que hacen que un músico de su calibre persiga y persista en encontrar mejores sonidos y composiciones con los que seguir fascinando a los que tenemos y tendréis el placer de escuchar su nuevo largo, esta vez en solitario, Do it all. Para este disco, Mathews se ha rodeado de buenos músicos, que le han ayudado a pulir el sonido redondo, el buen resultado final de éste plástico, como son, Carlos Otero, encargado de las guitarras eléctricas, Miguel Rocha a las cuatro cuerdas y Jorge Garrido a cargo de la batería. Un grandísimo productor como es Manuel Colmenero (Magnètica, Vetusta Morla) ha aportado todo su buen hacer a este álbum.

Do it all, nació a golpes de guitarra acústica y se adentra en distintos paisajes musicales, viajando desde el rock, al pop, pasando por el folk y el country. Disco en el que se nos muestra a un compositor más intimista, que bien tratando las canciones con sobriedad, crea unas buenas atmósferas e impregna cada tema de una personalidad y calidez patente a medida que el disco y cada escucha avanza. Un buen ejemplo de esta calidez y ese buen transmitir que ostenta Dan Mathews yace en mi corte preferido del disco “Cut your Ropes”. Una canción cargada de soledad que comienza a ritmos de acústica y poco a poco se va haciendo mas oscura con la entrada de la eléctrica, magnífico trabajo de Carlos Otero en el interludio del tema. Corte que serviría de contrapunto a la anteriormente mencionada es el tema escogido para la promoción del disco, “What Do I Really Want?, donde se nos habla de un tema como las relaciones de pareja, exprimiendo tanto los momentos mas convulsos como los más afectivos.

“Lettin Go” se nos muestra como un tema en el que las melodías han sido tratadas con calidez y suavidad pero que al mismo tiempo nos arrasa el corazón por toda la carga emotiva plasmada en ella y “Do It All”, funciona como sintetizador de todo este maravilloso álbum donde cada uno de los músicos exprime al máximo su instrumento.

En definitiva, un grandioso disco que desde la sobriedad nos hace disfrutar con un disco directo a nuestros sentidos y que nos deja un buen sabor de boca para hacerlo merecedor de todos los elogios que debe recibir.

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